Algunas de las actividades que se le deberán realizar periódicamente al equipo son:
Limpiar los filtros de aire acondicionado
Los filtros que contienen los equipos realizan el proceso de filtrado del aire dónde absorben las partículas de polvo, polen para evitar que estos lleguen al ambiente y de esta manera mantener el aire limpio.
Por esta razón, es conveniente realizar una limpieza periódica de los filtros de aire acondicionado, por lo menos una vez al año.
La limpieza de filtros se debe de realizar tanto si se cuenta con un equipo de climatización por conductos, como si se trata de un split o un tipo industrial.
Limpieza del desagüe.
El desagüe es un tubo fino por el que cae el agua por su propio peso.
La utilización de los equipos en modo frío hace que en la unidad interior se produzca un proceso de evaporación que hace que dentro del sistema se vayan acumulando gotas de agua. De no limpiarse cada cierto tiempo, el agua acumulada podría provocar malos olores, aparición de bacterias o producir avería en el funcionamiento.
Por este motivo es conveniente desaguar el equipo cada cierto tiempo.
Limpieza general de la unidad interior
Para garantizar su correcto funcionamiento, evitar la proliferación de bacterias, pero también para mantener la estética del equipo, es conveniente hacer una limpieza superficial de la unidad interior, usando los productos adecuados para no dañar el artefacto (no abrasivos).
Mantenimiento de la unidad exterior
La unidad exterior contiene alguno de los principales componentes técnicos del aire acondicionado: compresor, intercambiador, refrigerante.
Casi siempre las unidades exteriores se colocan a la intemperie, por lo que es conveniente revisarlas y limpiarlas superficialmente de forma regular para que no se produzca acumulación de suciedad y garantizar que ningún agente externo esté obstruyendo el paso del aire ni las rejillas del ventilador.
En caso de que la unidad exterior cuelgue de la fachada, es muy importante verificar el estado de los soportes del equipo para evitar accidentes.
Control de fugas de refrigerante
Es necesario supervisar que en el equipo de aire acondicionado no se produzcan fugas de refrigerante, ya que la pérdida de este, además de ser muy contaminante, su falta puede derivar en una avería fundamental en el compresor.
Esta rutina de mantenimiento sería ideal que se proceda en periodos de tiempo que van desde 60 días a 90 días. Dependiendo del número de personas que se encuentren en el área climatizada, será la mayor o menor periodicidad.
Te aconsejamos que recurras y confíes siempre en que sea un técnico profesional quien revise y se encargue del mantenimiento de tus equipos o sistemas de climatización, ya que de este modo obtendrás un mejor desempeño energético y extenderás su vida útil.